Año | 1991 |
Género | Concierto de canto telúrico |
Obra | Le monde, le diable et la chair |
Estreno | Bayonne, France |
Poco a poco fue aflorando lo que iba a ir constituyéndose como un principio de dramaturgia. Aquella Serpiente que había surgido de las entrañas de la tierra tras su letargo, anhelaba el encuentro con su antitético complemento. La Serpiente anhelaba fundirse con las energías de la flor del loto. Consciente o inconsciente de que sólo así se podría engendrar al Príncipe, el Príncipe de los sentidos.
La Serpiente había surgido de la tierra e iniciaba su itinerario hacia la morada de la Flor del Nenúfar. Pero no sería sin dificultad; debería soportar la carga de atravesar tres estadios distintos.
El primero sería el encuentro con el Mundo. Este Mundo que ofrecía bagatelas y vanidades a cambio de seducción, a cambio de la ausencia y confusión del espíritu; un Mundo que tenta a tanta gente y de cuyas redes tan pocos consiguen escapar una vez han sido atrapados.
Al espíritu de la Serpiente no le daban miedo los embates y la baratija del Mundo, porque se encaminaba hacia un destino mayor. Reconfirmada en la fuerza de su entidad, la Serpiente va haciendo su camino, donde debería encontrar a alguien con quien curiosamente a menudo se le había asociado, alguien que no le era del todo extraño: el Demonio.
La Serpiente supo mostrar al Demonio que sabía dónde latía su corazón, supo mostrarle que, antes de repudiarlo, sabía amar en él al ángel caído que había tenido el coraje de rebelarse ante los ojos que se llamaban detentores del bien o virtud. Había sabido entender la androginia de cualquier fenómeno aparente; que la luz no podía existir sin la oscuridad, que están el Bien y el Mal y se necesitan mutuamente para afirmar su existencia. También supo demostrar al demonio que conocía el camino más allá del Bien y del Mal, con lo que se ganó su confianza y el respeto.
Antes de despedirse, el Demonio le dijo: «Has sabido vencer el amor del Mundo, has sabido vencer el amor del Demonio, pero estuviera alerta, Serpiente, que a la Carne te conduzco.» Cautelosa por la advertencia del Demonio, la Serpiente continuó su camino consciente de que cualquier descuido podría arruinar su viaje.
Éste era el encuentro con el anhelo reproductor, una fuerza inmensamente superior a las voluntades y las intenciones de cada sujeto. La Carne embadala, posee y subyuga. Nadie es inmune a sus hechizos, sólo el sabio sabe entrar sin sucumbir y así convertir en luz su entrega.
Este tercer estadio, que aparentemente no presentaba ningún obstáculo, fue el que la Serpiente atravesó con más peligro, porque habría podido confundir el anhelo con el que iba encontrando, el camino con lo que conduce. Sí, la Serpiente se entregó, sucumbió, se bañó en el deseo y sólo, por fin, pudo obtener como recompensa sentir su cuerpo transmutado en luz.
Ya era ésta la Serpiente luminosa, la que había transmutado la Carne en luz, el deseo en amor, el acto de fusión en supremo verbo. Ahora ya estaba preparada para acercarse a la morada del Nenúfar.
A finales de 1991, toda Cataluña se enorgullecía con los preparativos y la próxima celebración de los Juegos Olímpicos. Nosotros nos preparábamos para presentar el primer resultado de nuestra experiencia en el Festival de Bayona, en el País Vasco francés, con el título “Le monde, le diable, la chair”.
Maria de Marias encarnaba el Mundo; Manu Lagarda, el Demonio y Mandi, la Carne.
La desnudez de cuerpo y alma durante todo el espectáculo no supuso ningún comentario alusivo, en su estreno en Francia, pero no fue así en el Festival de Murcia, donde llegamos a tener un piquete de extrema derecha en la puerta de la iglesia (desconsagrada) donde habíamos presentado el trabajo, por lo que tuvimos que escapar corriendo por la puerta de la sacristía.
Aquejado, volví a Barcelona al constatar todo lo que le faltaba a ese país para poder trascender los dogmatismos conceptuales de lo que son y significan las cosas. Como decía Joan Brossa, «es nadando contracorriente que se hacen hombros».
MUNDO, DEMONIO Y CARNE
Monólogo enterrado de Alma de serpiente
Como un falo erecto
por la vagina abrazado,
permanezco sereno,
envueltos los pensamientos
y en mi tierra sepultad
Aquí espacio y unidad
una misma cosa son
Desde el fondo de mi no manifestarme
los dos sexos unidos están
Omnipotente abandono,
no me dejes en mi viaje y en mi buscar
Diálogo de despedida de Alma de serpiente con la Tierra
Serpiente:– Las fibras de mi cuerpo ansían el despertar
Voy a abandonarte benefactora sin gesto,
cálido y tierno fondo de la tierra
Tierra: – Serpiente, tú que de nosotras las caricias percibes,
podrás disfrutar de la oscura mirada
que en tu ser todo lo ilumina,
conciencia de las profundidades.
Distante ante el bien y el mal,
serás temida y perseguida
Quien cercana a ti se sienta,
cercana a nosotras, la tierra, estará
Serpiente: – El aire cubrirá un lado de mi cuerpo
El otro, siempre cercano a ti, tierra,
por el mundo verás
Ni en mi más feliz momento
nada de ti he de olvidar
Tierra: Ve ya y atraviesa el puente
que de nuevo a nosotras te llevará
Diálogo de Alma de serpiente con el Mundo
Mundo: – O, tu infirme constancia que en el amor se busca
Serpiente: – ¿De dónde procedes tú que en mi espíritu navegas?
Mundo: – Soy yo, el Mundo, dicha y riqueza, admirado y envidiado
Conmigo gozarás de lo exquisito
Serpiente:– No de ese soñar se nutre
quien su cuerpo en tierra descansa
Mundo: – Eres emoción y pensamiento
Tu mirada inmoviliza la apariencia
Déjame que te acaricie
Serpiente: – Asperas se me hacen en la piel
las adormecientes caricias,
vanidades de este mundo
Mundo: – Aléjate del incauto que cerca de sí camina
Serpiente: – Lejos yo de mí perderás la mirada
que de la ilusión que a la cima te llevó
la raiz conoce
Mundo: – Sabes que en mí el mundo es un pasar
y que a mejores mundos aspiro
Semilla somos de nuevos mundos
y fruto de los pasado
En ti, serpiente, nuestro mundo,
con las aguas primordiales se fundirá
y por ello, dulce guía en mí tendrás
Premonición del Demonio
Serpiente: Mis entrañas se funden con la tierra
Bañado en la firme incertidumbre
de quien no conoce
Porque lleno de amor
no separa de sí
Desde ese oscuro fondo común
te recibo
Diálogo de Alma de serpiente con el Demonio
Serpiente: – Demonio, rebelde defensor de las fuerzas de la tierra
incomprendido y perseguido guardián
de la emoción más profunda
No vienes tú en contra mía
que de mí cercano estás
Demonio: – Serpiente que desde mi misma tierra emerges,
pocos como tú mi dolor comprenden
Serpiente: – Quien en ti la sabiduría no intuye
como a lo maligno de sí mismo te ve
Demonio: – Ni bueno ni malo vivo
En la oscuridad hallo mi luz
En el calor y silencio de la tierra
mi sentir
Serpiente: – Tú que bajo nuestros pies
sorteas las raíces de nuestra razón,
ven a mí bienamado diablo
Demonio: – Has sabido comprender el amor del mundo
Has sabido comprender el amor del demonio
Pero ponte en guardia, serpiente,
que a la carne te conduzco
Diálogo de la Serpiente con la Carne
Serpiente:– Carne irrefrenable
que al yo, en su lugar más íntimo,
alcanzas
En ti, desuncido el espíritu,
en caballos de amor cabalga
Carne:– En ti, sólido el miembro
y en tu mirada, amor
Blanco néctar hallará en ella su luz
PRENSA
Pdf. PIPIRIJANA. Egin. «Mística del oficiante» . Carlos Gil. 19/10/1991
Pdf. SUD OEST. Réinventé pour le corps. Pauline Pierrl. 19/10/1991